Federica es una joven que vive con su tía Tianna y su gato Gato. La chica, al igual que su tía y el gato, tiene el pelo tan rojo como el fuego. Además, está gorda, y es el blanco de las burlas de sus compañeros de clase. Por eso, Federica no es feliz. Un día, su tía, le confiesa que a ella le pasó lo mismo de joven, y le cuenta cómo se defendía de los chicos que se burlaban de ella. Mediante una especie de conjuro, su pelo ardía, y quemaba a todo aquel que se acercase a ella. Tianna le dice que ella también tiene ese poder. Pero cuando Federica lo usa, las cosas empeoran, y sus compañeros de clase empiezan a tratarla mal.

Franny es una niña muy inteligente, le encanta el colegio y también hacer locos experimentos científicos. Pero sus compañeros piensan que es un poco rara... por eso Franny quiere convencerles para que se interesen por la ciencia loca. Para conseguirlo construirá un robot y creará una fórmula para ser invisible.

Eliseo no vive en una gran mansión. Tampoco tiene grandes riquezas. Su ropa son prácticamente harapos. Pero solo le ha hecho falta un segundo, aquel en el que su mirada se cruzó con la de Elena, para llenar su vida por completo. Esta es la historia de ese segundo, y de todos los que vinieron después.

"Benjamín es igual a mí, pero distinto a ti" nos dice un niño, de aproximadamente siete años para presentar de su hermano gemelo. Claro son gemelos, son iguales, muy parecidos. Ambos son colorines, tienen pijamas con patas de lana y los pies gorditos. Pero hay una pequeña diferencia en Benjamín que lo hace distinto al resto de los niños, aunque su hermano no entiende por qué, ya que lo ve como él, igual a él. Benjamín es un niño que tiene síndrome de down. Y para mucha gente, incluso para muchos otros niños, parece muy diferente, pero para su hermano, la diferencia con su gemelo es insignificante.

Todos los albatros saben volar, excepto Jacobo. Los ancianos quieren expulsarlo de la isla, pues piensan que un albatros que no vuela no es un auténtico albatros. Los padres y los amigos de Jacobo están muy preocupados por él. Sin embargo, él está contento, pues, aunque no vuela, puede hacer muchas otras cosas.