Santi nunca acaba sus tareas en el colegio y ha de terminarlas en casa. Lo que le gusta es meterse bajo la mesa y soñar que está en una cueva, una nave espacial o un submarino. Pero sobre todo, dibujar en su cuaderno de hojas blancas, con el que vive sorprendentes aventuras.

Margarita vive feliz con sus padres y su hermano Adolfo. Pero un día en la televisión aparece la noticia de un secuestro. Jacobo, un chico de quince años ha sido secuestrado y su familia pide noticias de él. A Margarita le llama la atención la noticia porque ve la imagen de una chica de su misma edad, la hermana de Jacobo, que no puede dejar de llorar.

Lulino se ve obligado a emigrar a Sevilla con su hermana y su cuñado, al que le han ofrecido un empleo como sacristán en la catedral. El muchacho se niega a separarse de su cabra Maltea y el cuñado acaba consintiendo que se la lleve. Allí, sobre los tejados de la urbe, vistos como un enorme campo de tejas que le recuerda al de su pueblo, viven unas imaginativas y curiosas experiencias, asediados por la hostilidad de la ciudad y la escopeta de un canónigo que ha visto en la cabra al diablo.

Pupi es un extraterrestre que le gustaría celebrar su cumpleaños pero hay un problema... ¡Pupi no tiene años! Por eso cuando escucha decir a un anciano que le sobran muchos, decide pedirle prestados unos cuantos. Con la ayuda de todos, Pupi conseguirá celebrar una fiesta estupenda.

Una niña de ocho años tiene un don increíble: posee un dedo mágico con el que, cada vez que no puede aguantar una situación, apunta a la persona que ha llegado a irritarla, transformándola de la manera más inimaginable. Una de estas transformaciones la sufren unos vecinos suyos a los que les gusta demasiado ir de caza; porque aunque sean sus amigos, ella no puede resistir la idea de que vayan por ahí matando patos...